Plena Inclusión Madrid celebró un encuentro de trabajadores sociales.
Los participantes hablaron de cómo ha cambiado la atención con la COVID-19.
Por ejemplo, ahora la atención a distancia es más importante.
El coach Juanjo Pinedo les mostró cómo gestionar sus emociones y ayudar a las familias a gestionar las suyas.
La especialista Patricia Lodín les enseñó a hacer trámites digitales.
También a usar herramientas de comunicación online, como Zoom o Skype.
El encuentro terminó con grupos de trabajo para compartir las experiencias de los trabajadores sociales.
Los profesionales del trabajo social vinculados al movimiento asociativo compartieron sus experiencias y debatieron sobre el nuevo modelo de atención impuesto por la COVID-19 en una jornada virtual organizada por Plena Inclusión Madrid el pasado 1 de diciembre. Inaugurado por Daniel Gil, decano del Colegio Oficial de Trabajo Social de Madrid, y Ángel San Gregorio, director general de Plena Inclusión Madrid, el encuentro, reunió a unas 70 personas de 40 entidades distintas, estuvo dividido en varios bloques y contó con la participación de Juanjo Pineda, coach certificado ICF y creador del método Explora mindfulness, y Patricia Lodín, especialista en tecnologías de la información y la comunicación (TIC).
En una primera ponencia, Juanjo Pineda detalló las claves del apoyo emocional y del autocuidado del profesional en todo tipo de situaciones, pero especialmente en circunstancias extraordinarias, como las vividas durante 2020 por la pandemia. En este sentido, compartió con los participantes pautas básicas de autocuidado y de ayuda para gestionar las emociones de las familias de las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo y las emociones propias.
Patricia Lodín, por su parte, hizo hincapié sobre un asunto que ha preocupado especialmente a los trabajadores sociales en todo este periodo y que se ha centrado en la necesidad de ejecutar distintos trámites burocráticos por medios telemáticos. Los asistentes pudieron profundizar más en el desarrollo de sencillas operaciones, como tramitación del DNI electrónico, de un certificado digital, etc., y obtuvieron conocimientos sobre herramientas de conexión y comunicación (Teams, Zoom, Skype, etc.), habituales ya en el trabajo profesional, pero aún poco conocidas por las familias.
Para concluir la jornada, los participantes se repartieron en diversos grupos de trabajo para aunar criterios técnicos del día a día de los trabajadores sociales. Además, expusieron y debatieron sobre casos complejos a los que se han enfrentado y, por último, analizaron el papel del profesional y las circunstancias vividas por las familias durante la crisis de la COVID-19.