Voluntarios de la empresa SIKA y personas de la Granja San JOsé de Fundación Gil Gayarre pasaron una mañana juntos.
Realizaron hoteles para insectos.
Estos hoteles son estructuras que se hacen con palets y con elementos naturales que atraen a los insectos y fomentan la biodiversidad en la zona en que se instalan.
Un grupo de empleados de SIKA participantes de su academia sostenible, visitó el centro “Granja San José” de la Fundación Gil Gayarre para para realizar una acción de voluntariado corporativo, enmarcada en el proyecto Naturalezas Diversas. Participantes
Junto a personas con discapacidad intelectual los voluntarios construyeron hoteles de insectos, estructuras provistas de elementos naturales que atraen insectos beneficiosos y potencian la biodiversidad en un jardín o espacio verde. Estas estructuras, generalmente se realizan con pallets, y se rellenan con otros elementos como ramas, piedras, ladrillos…, creando así un hábitat de envejecimiento para los invertebrados.