El Centro Español de Documentación sobre Discapacidad publica un estudio sobre la pandemia.
Este centro esta vinculado al Real Patronato sobre Discapacidad.
El estudio identifica los problemas que han tenido las personas con discapacidad durante la pandemia.
Además, propone cosas qué se pueden hacer para evitar estos problemas en el futuro.
El Centro Español de Documentación sobre Discapacidad (CEDD) del Real Patronato ha publicado ‘El impacto de la pandemia COVID-19 en las personas con discapacidad’, un informe que incide en las consecuencias de la crisis sanitaria en la calidad de vida de las personas con discapacidad y en el ejercicio de sus derechos. El texto, que analiza las principales dificultades que han afrontado las personas con discapacidad y sus familias en ámbitos como los servicios sociales, el empleo, la educación, la salud y, como hemos mencionado, los derechos básicos, invita a reflexionar sobre las consecuencias socioeconómicas y los retos futuros que afrontan estas personas.
El texto, una investigación de la Dirección General de Derechos de las personas con Discapacidad del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, fue presentado el pasado 22 de junio en un acto con la presencia del director general de Derechos de las Personas con Discapacidad y director del Real Patronato sobre Discapacidad, Jesús Martín Blanco; la consejera técnica del Real Patronato sobre Discapacidad, María Teresa Fernández Campillo; el presidente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), Luis Cayo Pérez Bueno; y la directora del Centro Español de Documentación sobre Discapacidad y una de las autoras del informe, Elena Ortega Alonso.
El informe concluye, entre otras cosas, que un tercio de las personas con discapacidad perdió su empleo en los seis primeros meses de la pandemia un 9,3% porque pasaron a estar en ERTE y un 25% porque fueron despedidas.
En el ámbito de la educación, la investigación determina que la mayoría del alumnado con discapacidad de más de 6 años, un 80%, recibió respaldo de su centro para continuar con sus estudios y que solo uno de cada cinco no contó con ese respaldo y necesitó ayuda de familiares o de su entorno o, en un 11,5%, no pudo continuar con su formación.
Empeoramiento de la salud
Aproximadamente la mitad de las personas encuestadas afirma que la pandemia ha perjudicado a su salud física y mental y que ha estado más intranquilas y nerviosas durante ese periodo. Además, en el ámbito de la sanidad, se pone de manifiesto las complicaciones que ha supuesto la brecha digital que afecta especialmente a las personas con discapacidad a la hora de realizar consultas médicas, solicitar una cita, etc., así como las carencias en accesibilidad universal.
Un tercio de las personas que han participado en el estudio asegura que no ha recibido los servicios o las prestaciones sociales que requería durante la pandemia y, por ello, una gran proporción confiesa que su estado de ánimo y su salud física y mental han empeorado.
A partir de estos datos, el informe concluye con unas recomendaciones de actuación ante posibles situaciones similares en el futuro, como la atención personalizada y los apoyos individuales, el impulso de la accesibilidad universal o la implementación de mecanismo que alivien la presión del sistema de servicios y prestaciones sociales.
Para realizar esta investigación se ha utilizado una metodología cualitativa y cuantitativa, a partir de 4351 encuestas online y de la aplicación del método Delphi con profesionales y personas expertas.